Uno de los investigados, empleado del hospital donde tuvieron lugar los hechos, sería el supuesto artífice material de las sustracciones, aprovechando su situación laboral para acceder al almacén de medicamentos y robar las hormonas. El segundo sospechoso, conocido del anterior, sería el encargado de recibir la mercancía para su distribución en gimnasios, ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.

 

La investigación, llevada a cabo por agentes adscritos a la Comisaría de Distrito Oeste de la Policía Nacional en Málaga, se inició precisamente con la denuncia de un responsable de un hospital, tras detectarse la sustracción de varios lotes de hormonas de crecimiento del almacén de medicamentos.

 

Las averiguaciones se centraron en identificar al responsable de los hurtos, que se habían producido en varias ocasiones, contabilizándose la sustracción de ocho lotes de hormonas, valorados en más de 10.000 euros.

 

Las diligencias practicadas por los investigadores condujeron a la detención de un empleado del centro médico, quien habría aprovechado su condición de trabajador para acceder a las instalaciones en las que se conservaban los medicamentos y hurtar la mercancía del interior. Esta persona, de 39 años, fue detenida en relación con los delitos de hurto y contra la salud pública.

 

Continuando el rastro de los lotes de hormonas del crecimiento, los agentes descubrieron que el principal investigado contaba con la colaboración de un conocido, de 28 años, quien recibía el género para distribuirlo en salas de culturismo, donde las hormonas del crecimiento se utilizan para ganar masa muscular.

 

Este último fue arrestado por su presunta responsabilidad en los delitos de receptación y contra la salud pública. De los hechos conoce el Juzgado de Instrucción número 12 de Málaga.